
Lo impensado. Lo más temido. La pesadilla hecha carne. River jugará la Promoción como consecuencia de sus propias limitaciones y la mala suerte. La primera razón es porque esta tarde en el Monumental no pudo con Lanús, cayó por 2-1, y no llegó ni siquiera a una victoria que le hubiese permitido jugar un desempate. Y la otra, la del azar, es porque Quilmes mereció más ante Olimpo, pero perdió y ese resultado fue el que finalmente lo condenó.
Fuente: http://www.diariochaco.com/