El secretario de Seguridad de la Provincia: Javier Oteo, confirmó que la causa de la muerte del niño Johan Agustín Barrios, de cinco años, hallado sepultado en un montículo de arena para construcción no fue la asfixia, como se creyó en un primer momento cuando cobró fuerza la hipótesis de que había sido atrapado al desmoronarse el material.
Oteo viajó junto a otros funcionarios del Ministerio de Gobierno, en una comisión encabezada por el mismo ministro Marcos Verbeek, para interiorizarse de la situación e imprimirle celeridad a la investigación del hecho. En el lugar, el primer informe que recibieron fue la confirmación de que el pequeño había sido asesinado.
Los médicos forenses trabajan ahora en las exámenes pertinentes para determinar si también fue abusado sexualmente, algo que entre los vecinos ya se da como un hecho. Mientras tanto, los investigadores buscan pistas e indagan en el entorno del pequeño, en el marco de la causa abierta en la fiscalía de Liliana Luppi, de Sáenz Peña.
Johan fue hallado el martes por la tarde por dos menores que jugaban en una montaña de arena en el barrio 40 viviendas, donde reside su familia, y que dieron aviso a sus padres, quienes lo rescataron y trasladaron a un Centro de Salud, donde se comprobó que ya estaba muerto. De ahí, su cadáver fue trasladado a la morgue judicial de Sáenz Peña, donde se le practicó la autopsia que determinó la verdadera causa de la muerte, convirtiendo en homicidio lo que a prima facie se interpretó como un accidente.
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